Hace años, en una de mis visitas a Madrid, me di cuenta de la gran cantidad de cafeterías de especialidad que estaba apareciendo en la ciudad. No es que fuera ningún secreto ni yo una observadora especialmente avispada: había leído algunos artículos sobre el nuevo fenómeno cafetero madrileño en los blogs y revistas con más difusión. Así que, a la vuelta a casa, decidí hacer una selección de aquellos que más me habían gustado.
Aprovechando nuestra reciente visita a la ciudad, he descubierto algunas cafeterías de especialidad que sumo a mi lista de favoritas: Dot Café Bar, Wilko y Hola Coffee. Y es que, ¿qué más se puede hacer en julio en el infernal Madrid aparte de tomar iced latte a litros?
El brunch en Dot Café Bar
Descubrí Dot Café Bar en una visita relampago en 2022, durante la cual me alojé cerca de Atocha. En ese entonces prové su increíble tostada de mantequilla de cacahuete, plátano y oreo para aguantar una jornada de turisteo por la ciudad. Quedé tan enamorada de su ambiente, de su luz, de su paleta de colores, de su café de especialidad y de su carta que tuve claro que, tarde o temprano, volvería.
Esta vez, pero, acudí cuál zombie trasnochado con una necesidad urgente de café. De buen café. Y es que habíamos sobrevivido a la primera jornada del festival MadCool con unas temperaturas infernales y un sol abrasador. Así que, escondidos tras las gafas de sol y con los ojos llenos de sueño, pedimos dos cafés, un bowl bento y un bikini de pastrami (no vegano, ofc).
Oh, y culminamos nuestro brunch resucitador con un helado de mantequilla de cacahuete y chocolate. Este sí, vegano y bien frío 🍨
Wilko Coffee
Abrió en abril del 2022 y desde entonces lo tenía en mi lista de cafeterías de especialidad en Madrid. Pero dada su ubicación, nunca había tenido la oportunidad de visitarlo. Por suerte, durante este último viaje, tras un copioso almuerzo en Los Andenes y una rápida comprobación en Google Maps, me di cuenta de que estábamos sólo a dos manzanas. Así que, sin correr demasiado y por la sombra, nos dirigimos a Wilko Coffee.
El nombre de la cafetería, Wilko, proviene de la palabra alemana wilkommen o bienvenido. Y es que su dueño, Marcos, vivió en primera persona la revolución del café de especialidad en Berlín, ciudad en la que se inspiró para abrir y decorar el local tras la pandemia.
Aunque nuestra visita fue breve (y llegamos sacando el estómago por la boca después de la comilona peruana), pudimos disfrutar tranquilamente de dos deliciosos iced lattes que, literalmente, nos salvaron la vida y nos refrescaron el alma.
Hola Coffee
Este rinconcito de la calle Dr. Fourquet fue nuestro pequeño oasis. A solo diez minutos del piso que habíamos intercambiado a través de HomeExchange, lo descubrimos buscando algún lugar cercano donde desayunar tras nuestra segunda noche en el festival MadCool. Poco nos imaginábamos que nos alojábamos cerca de una de las mejores cafeterías de especialidad en Madrid.
El espacio nos gustó tanto que desayunamos allí el resto de días que estuvimos en Madrid: tostadas de crema de cacahuete (sí, es una obsesión, lo admito) y mermelada con un par de enormes cafés, con y sin hielo, y mucha agua fresca. Hablando en sus bancos de madera, disfrutando de la tranquilidad y de las conversaciones ajenas, se nos hacía difícil volver a la calle bajo el sol de justicia.
A la vuelta a Barcelona descubrí que Hola Coffee son también tostadores y que, por suerte, suministran café a algunas cafeterías de especialidad de Barcelona. Así que… ¡Habrá que ir a probarlas pronto! 🤪
¿Y tú? ¿Cuáles son tus cafeterías de especialidad favoritas en Madrid? Cuéntame, ¡te leo en los comentarios!
Aina,